Parque nacional de Forêts: ¡descubrir una naturaleza exuberante!

Descubrir la naturaleza exuberante del Parque nacional de Forêts para muchos es un sueño. Su situación geográfica, su clima y su relieve lo han convertido en una auténtica reserva de biodiversidad. Los grandes hayedos y robledales, las combes llenas de sombra, los prados secos y húmedos y los pantanos de toba calcárea crean una impresionante diversidad de paisajes que albergan una fauna y una flora muy abundantes.

Recorrer el Parque nacional de Forêts permite descubrir una naturaleza rica y densa. Sus sotobosques ofrecen hospitalidad a ciervos, corzos, jabalíes, tejones, gatos monteses, quirópteros y a una gran cantidad de otros pequeños animales: se han registrado más de 3000 especies. Entre los hongos típicos de los suelos calcáreos del Parque nacional pululan los coleópteros, insectos, reptiles, anfibios e invertebrados. En los bosques del Parque viven más de 50 millones de árboles. Algunos, con más de 300 años, son verdaderos testigos de la historia. re.

El reino de la cigüeña negra

La cigüeña negra, el emblema del Parque nacional de Forêts, anida en los majestuosos árboles durante los meses cálidos. Esta gran ave migratoria aprovecha el dosel forestal mientras que el sotobosque se cubre de junquillos amarillos y de campanillas de primavera. Después llega la época para observar las orquídeas, como el zueco de Venus, la mayor orquídea de la Francia continental, otro regalo para los ojos en esta superficie floral. Haz como la cigüeña negra y aprovecha este lugar lleno de encanto.

Cigogne noire

Brocard

Los lugares imperdibles

Observación de la naturaleza y de los paisajes

Dejarse hechizar por la «tufière» de Amorey

Al visitar el pueblo de Auberive, sus prados húmedos y hiedras trepadoras, es casi obligado seguir el camino hasta llegar al bosque, donde se oculta el espacio natural de la «tufière» de Amorey. Durante el paseo podrás escuchar numerosas aves. Una vez allí, déjate fascinar por la alfombra de musgos, bañada por la suave luz que atraviesa con dificultad las copas de los árboles. Disfruta de la danza de las libélulas que embrujan el lugar, y sumérgete durante horas en este ambiente misterioso.

Tuffière d'Amorey

El encanto de la colina de Taloison

Reserva un momento para uno de los espacios naturales más importantes de la meseta de Langres. La colina de Taloison se utilizó como lugar de pasto para las ovejas y cabras del pueblo, una actividad de pastoreo que mantuvo un ecosistema excepcional donde se puede observar la danza de la hormiguera de lunares, una preciosa mariposa que no se encuentra en ningún otro lugar de la región, y también el saltamontes de alas azules y el saltamontes de cascabel, hoy muy poco comunes en Haute-Marne. Solía estar llena de maleza y parcialmente invadida por los pinos, pero hoy se encuentra protegida por su increíble valor ecológico, sensorial y visual.